En un mundo donde las formas de vivir el amor son cada vez más diversas, las relaciones de pareja también están evolucionando. Lejos de los modelos tradicionales, una nueva tendencia está cambiando la forma de vincularse.
Las relaciones LAT están captando la atención de quienes buscan mantener su independencia sin dejar de compartir un vínculo amoroso.
Las relaciones LAT, también conocidas como Living Apart Together (vivir separados juntos), son un tipo de relación en la que las parejas deciden no vivir bajo el mismo techo, a pesar de mantener una relación comprometida y estable.
Los acérrimos defensores de esta práctica argumentan que la típica convivencia da paso a la rutina y, por consiguiente, al desgaste de las relaciones, provocando discusiones y problemas en la pareja que pueden evitarse viviendo separados.
Sin embargo, para que LAT funcione se deben establecer –de mutuo acuerdo– una serie de condiciones, como la frecuencia de los encuentros, la distancia entre las viviendas o si será por un tiempo determinado o permanente.
Las relaciones LAT no son nuevas, pero en los últimos años han ganado popularidad, especialmente en países europeos como España, Suecia, Países Bajos y Reino Unido. Sin embargo, también está empezando a ser más común en América Latina y en Estados Unidos, donde cada vez más parejas consideran este modelo como una forma viable de mantener una relación amorosa sin sacrificar su independencia personal.