El fenómeno denominado “turismo de supermercado”, basado en la ola de chilenos que cruza la frontera con Argentina para aprovechar el conveniente tipo de cambio y abastecerse de productos de primera necesidad -ante el alto costo de la vida en Chile-, está comenzando a generar impacto en el comercio de localidades fronterizas. El ejemplo más revelador es la avalancha de connacionales que está realizando visitas “express” a Mendoza. Si lo llevamos a números, en abril 58.200 chilenos cruzaron a la localidad trasandina, el triple de lo registrado en marzo y siete veces más que hace un año, en medio de la crisis cambiaria que vive el vecino país, lo que se traduce en productos hasta tres veces más baratos para los chilenos.
Ayudas que fueron analizadas desde la la Región de Aysén, que entre otras cosas, destacaron la rebaja a los combustibles, medida que acusaron pedir hace varios años por ser una zona extrema. El alcalde de Coyhaique, Carlos Gatica, planteó que la región de Aysén tiene precios elevados en los productos debido a su aislamiento geográfico, lo que se ha visto afectado aún más con el incremento de precios después de la pandemia y el fuerte aumento del valor de los combustibles. Es por esa razón que el jefe comunal aseveró que “cuando uno analiza las políticas o las acciones, los mecanismos que ha desarrollado Uruguay en parte también de sus ciudades fronterizas, uno pudiese también atender a que en Chile se puede practicar por ejemplo lo que significa la eliminación del impuesto específico de los combustibles, al menos en esta región”. “Lo que también puede significar la eliminación de alguno o la rebaja de algunos impuestos con respecto a productos esenciales, lo que significa la fruta, las verduras, la harina, el aceite, el azúcar, etcétera”, agregó.