La violencia en la Supercopa se toma la agenda del fútbol chileno, daños al Memorial del Estadio Nacional, más de diez lesionados y una serie de asientos de la galería norte completamente quemados son algunas de las tristes postales que dejó el duelo entre Colo Colo y Huachipato.
Uno que tuvo que ser suspendido al minuto 78 y que también apunta directamente a la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), organizadora del evento. Casi 24 horas después del inicio del partido, el presidente del ente, Pablo Milad, junto al gerente de Ligas Profesionales, Yamal Rajab y el gerente de Operaciones y Seguridad, Felipe De Pablo, tuvieron que dar una conferencia de prensa para abordar el tema.
Las primeras medidas son que se jugarán los 12 minutos restantes en una fecha a determinar y que se presentará una querella criminal en contra de las personales que resulten responsables por los actos de violencia. Sobre el primer punto, aclaró que se jugará sin público y que se hablará con las autoridades para determinar el estadio que reciba el cotejo.
Eso sí, una de las declaraciones más destacadas de la conferencia fue el llamado que hizo el presidente de la ANFP para acelerar la aprobación de una ley que determine la obligatoriedad del reconocimiento fácil para ingresar a los partidos del fútbol chileno. De hecho, este encuentro había funcionado como un lanzamiento para la inscripción voluntaria al Registro Nacional de Hinchas.